En un rincón del pirineo aragonés emerge una de las cimas más bellas del macizo. La punta Escarra de 2751 metros.
Su esbelta figura llama la atención de esquiadores desde la cercana estación de Formigal. Se puede acceder con eskies bajando las laderas del lado sur de la estación y alcanzando la base del corredor norte de dificultad fácil. De forma más salvaje y esforzada podemos acceder al mismo punto desde el valle de Aragón exactamente desde el fuerte del Col de los Ladrones .
Un recorrido más largo y siempre ascendente nos llevará al mismo punto después de saborear las hermosura de este valle, uno de los más característicos del pirineo aragonés.
El corredor es fácil y ancho pero una vez saliendo del mismo tenemos que remontar la parte final del pico, una escalada mixta con pasos que requieren el uso de la cuerda, piolets y crampones.
La intención es salir el día 1 por la tarde para dormir en Jaca y subir a punta Escarra el Viernes.
Si esto es demasiado precipitado teniendo en cuenta la fecha podemos hacerlo el 2 por la mañana y reservar la actividad para el sábado.
Su esbelta figura llama la atención de esquiadores desde la cercana estación de Formigal. Se puede acceder con eskies bajando las laderas del lado sur de la estación y alcanzando la base del corredor norte de dificultad fácil. De forma más salvaje y esforzada podemos acceder al mismo punto desde el valle de Aragón exactamente desde el fuerte del Col de los Ladrones .
Un recorrido más largo y siempre ascendente nos llevará al mismo punto después de saborear las hermosura de este valle, uno de los más característicos del pirineo aragonés.
El corredor es fácil y ancho pero una vez saliendo del mismo tenemos que remontar la parte final del pico, una escalada mixta con pasos que requieren el uso de la cuerda, piolets y crampones.
La intención es salir el día 1 por la tarde para dormir en Jaca y subir a punta Escarra el Viernes.
Si esto es demasiado precipitado teniendo en cuenta la fecha podemos hacerlo el 2 por la mañana y reservar la actividad para el sábado.
8 comentarios:
Este fin de semana ha tenido lugar una salida organizada por la sección de montaña al pirineo aragonés. Salida masiva de esas que hacen que te preguntes sobre la existencia de la misma. Lejos del desánimo los integrantes del grupo parten el Jueves por la tarde, primer día del año y "con la resaca a cuestas" como diría el cantautor nos vamos de fiesta y arranca el montañero la partida . Las últimas palabras de nuestra esposa o madre, según se mira la historia fueron "ten cuidado con el coche que últimamente hace cosas raras". Salvo la falta de amortiguación a tener en cuenta en la Autovía A-2 para evitar partirnos la cabeza con el techo del vehículo la cosa iba según los canones. O sea pasamos por Calatayud a las 3h de la salida cuando la máquina hace un extraño. Como que se frena la hija ... y pierde fuerza en unos de esos 3 puertos seguidos que separan tan insignes urbes mañas, la ya citada y la vinícola Almunia de Doña Gorrina. No quiero pensar mal y pregunto al copiloto si ve inclinarse a los árboles atacados por el temido bierzo, no sea esta junto a la cuesta de marras causa del parón. Nada, contesta, no se mueve una rama, cosa rara por estas latitudes, ya que el viento azota la zona 364 días al año y es la responsable de la ausencia absoluta de ciclistas baturros en el pelotón internacional.
Alcanzadas las cotas el coche vuelve a la normalidad o sea a los 120 pero repite comportamiento en la siguiente rampa para hacerlo más tarde a la sombra de los 2334000 molinos de viento de La Muela. "Algo va mal" le digo al niño, cuando en 3ª alcanzamos la inasumible velocidad de 60km/h entre pitos, bocinazos, luces largas, de turismos, autobuses, camiones de carga, caballerizas e incluso un ciclista que frenan de golpe debido a nuestra marcheta. Desde aquí a Jaca tan sólo nos encontraremos una tachuela de renombre, el puerto de Monrepos y como parece que en el llano el ford se comporta barajo la posibilidad de no interrumpir el viaje, posiblidad que desestimo a las puertas de Huesca cuando ya la cuestecilla más insignificante nos hace bajar y bajar a niveles inaceptables.
En este tipo de situaciones es difícil tomar decisiones, asumir el riesgo de llegar a Jaca, buscar un taller de mañana, salir al monte y esperar a la vuelta que el milagro sea o apostar por lo más sensato que es acudir a un concesionario oficial de la ford en una capital de provincia, como ya está cerrado y es día 1 pasar noche a la fresca, asomar la nariz por la cristalera a las 7.55 de la mañana tras dormir en el coche a -5º en la misma puerta , contarle al jefe de taller la película del viaje, pedir por favor que el problema sólo sea un manguito y que por tratarse de un taller oficial cuenten con el consiguiente repuesto, exiguirle que lo arregle en un pis pas, continuar viaje hasta Jaca y realizar las actividades programadas como si nada hubiera pasado. Pues si, tomamos la opción 2 la más sensata. Además que coño, hemos pasado 200 veces por Huesca y nunca hemos entrado a conocer tan bella ciudad, eso si, más pequeña que un barrio de Mataelpino, así que aprovechamos la desgracia para hacer turismo y darnos un garbeo por la misma.Seguro que mañana todo sale bien.
Tras una larga espera que supera la hora el mosqueo es inminmente, la cosa no tiene muy buena pinta. a la llamada del jefe acudimos mientras escuchamos "Miguel puedes venir, malas noticias".
Comunicado el paro cardiaco del enfermo, su ingreso en planta, habiendo hecho los papeles y avisados los celadores encargados de trasladar al enfermo a su lugar de residencia cerca de la familia, se abre un abanico de posibilidades sobre como continuar o no, la aventura. Llamadas, mensajes, seguros, internet, estación de autobuses... dudas en definitiva durante 3 interminables horas que terminan con la llamada de unos amigos , los abuelos, porqué de esta guisa vestían en la san Silvestre de Mataelpino, la última vez que les vi, Manu y Mónica o Monica y Manu porque tantu monta y monta tantu la Monica como el Manu, válgame este exceso linguística u homenaje a don Fernando porque andamos por Aragón
Así que aquella misma tarde nos encontramos en el corazón del pirineo, más lleno que nunca, dicen desde el 2007, y es que la crisis es historia, al menos para los de la clase social que practican esqui alpino, verdadero motor económico de estos valles con perdón de los que practicamos el más humilde deporte del alpinismo, también santo y seña de turismo local especialmente cuando los remontes, teleféricos y maquinas ceden su actividad cuando el manto blanco se retira. Tras cálida acogida y reencuentro nos planteamos que hacer al día siguiente para que ,este evento tan necesario para la supervivencia mental de quien escribe, la subida de adrenalina de quien le acompaña y el compromiso cumplido de nuestra adorada sección de montaña, sea verdad que contaros con palabras, con imágenes.... con emociones que plasmen la inconmensurable belleza de estas montañas, aunque a fecha de hoy, ya bien entrados en el siglo XXI, no hay cámara de fotos, no hay nikon ni Cannon, ni hay Saramagos ni Garcia Marquez, ni Martinez Pisson, ni ha nacido´el Sebastían Alvaro capaz de plasmar, expresar, grabar o contar ni de cerca lo que nuestros ojos disfrutan.
Y es que estamos en Llano del Hospital, en un paraje único, uno de los más emblemáticos del pirineo. Levantamos la vista y no paramos de apreciar cimas impresionantes, aristas imposibles, corredores interminables, un mundo de montañas a elegir a la carta. Sorprenden las declaraciones de alpinistas llenos de ego que afirman que no quedan montañas en las que disfrutar en este planeta. Su nivel de escalada debe ser tan excelso que escalar el corredor norte de Literola, el diedro de la la Maladeta, la cresta de Salenques ,la del Maupas al Bom o la cascada de hielo de Aigualluts son pecata minuta para estos superdotados pero para nosotros, humildes montañeros, ascender al pico Maladeta por su fácil corredor no deja de ser una aventura de las que dejan huella en nuestra memoria además que va a suponer un esfuerzo físico y mental importante dadas las condiciones de la aproximación y los problemas que vivimos allá arriba cuando tuvimos que deshacer el nudo gorgiano de descender un número excesivo de gentes que nos encontrábamos en la cumbre . Pero esa es otra historia, la meramente alpina, la simplemente deportiva, la bella historia que justifica tantas peripecias y recobecos en el camino de las cumbres
Enperchamos el traje del viajante para disfrazarnos de montañeros y contaros como sucedieron las cosas cuando la civilización con sus dires y diretes quedó a un lado y dejó paso al mundo salvaje de las montañas. A las 18.00 con mas sombras que luces, a pesar de la brillante luna que empezaba a asomar por detrás de la Foracada , tomamos rumbo a la Renclusa por las pistas de esqui de fondo de Llanos de hospital. Algún despistado o buscador de soledades aún andaba marcando músculo por este maravilloso laberinto de pistas , las más completas y variopintas del pirineo que hace las delicias de estos amantes de las tablas que no se conforman con deslizarse cuesta abajo y que prefieren disfrutar del placer de resbalar de una forma diferente, más aeróbica , esforzada y ecológica que los vecinos esquiadores alpinos de Cerler. Seguíamos la estela de los surcos convencidos que debíamos seguir hasta la Besurta, ese lugar emblemático donde en verano los coches se dan un descanso e invernan las mismas horas que sus ocupantes pasan a ser protagonistas del cuento y el sueño de subir al cielo. Un esquiador de montaña que nos precede abandona la cómoda pista para encarar una rastro de esqui no carente de marcadas huellas de botas. Cometemos el error de creer que aquel es el camino correcto, la ruta de invierno, unos 500m antes de la Besurta. Si en los primeros 100m la ruta se muestra relativamente amable a partir de entonces entramos en el típico territorio de nieve blanda pero no mucho o sea que a cada paso parece que el manto blanco aguantará nuestro peso y cuando confiados metemos presión al gemelo para lanzar la pierna opuesta toda la extremidad inferior cae unos 30cm en un agujero sin final que nos obliga a realizar un esfuerzo sobrehumano para extraer la misma del abismo y proceder de la misma manera. Este mecanismo tan trivial se puede convertir en insoportable y cuando esto pasa uno se arrepiente de no haber ahorrado para especializarse en eso de el esqui de montaña y en poder comprarse el equipo adecuado y más cuando de vez en cuando aparecen cual fantasmas figuras humanas después de nosotros que nos alcanzan y superan navegando por encima de las aguas cuando nosotros apenas asomamos la barbilla La ley de la gravedad vuelve a no tener amigos entre los más pesados y en esta desventura ,de la que os hago participes, debo decir que miki Jr sale muy aventajado. Por si fuera poco me he dejado los bastones en casa y escapar de cada agujero implica apoyar mis manos sobre la helada nieve. El resultado es que al final después de 2.30h infernales, gateando más que andando, llegamos a ese paraíso, hoy más que nunca, que es el refugio de la Renclusa situado a 2140m donde cenaremos y tomaremos unas cervezas, antes de irnos a dormir para intentar mañana escalar la Maladeta, montaña esta elegida por su belleza, su técnica parte final y sobre todo porque sabemos que algún chalado la ha visitado antes que nosotros y por tanto nos facilitará el camino.
No he contado que el refugio está hasta las trancas de gente y como no estamos federados, no hemos reservado y hemos llegado tarde los regentes de la renclusa nos "condenan" a ocupar una habitación en la planta baja cruzando el comedor, una habitación llena de literas en las que sólo nos acompaña una parejita sin ganas de sexo. En definitiva, estos pecados antes mencionados nos regalan la posibilidad de dormir sólos y sin ruidos algunos, con las mantas que nos de la gana y sin soportar a esos montañeros que bajos de forma deciden levantarse a las 4 de la mañana para que el día les permita alcanzar las cumbres de 3000 metros y no morir en el intento. Así que a las 8.00 extrañado que nadie ( la parejita) se ha levantado decido sacar la nariz de entre tanta manta y bajar al comedor cuando compruebo que prácticamente todo el mundo ha salido ya pal monte. Avisado miki Jr nos tomamos un ágape ligero y queremos emprender camino cuanto antes. Haciendo la mochila me doy cuenta que he olvidado los crampones e iluso de mi le pido el favor a uno de los trabajadores del refugio que me los deje a lo cual accede sin problema, "de montañero a montañero amigo" me dice " por 7 euros" remata. Hasta que punto se ha comercializado esto del monte.
A las 9.00 salimos . Miki no se encuentra bien en los primeros metros por lo que decidimos adaptar la marcheta para que el niño coja ritmillo. Por el mismo camino que hace 3 meses era un canchal de piedras enormes que nos obligaban a saltar de una a otra para avanzar hoy ascendemos por un manto totalmente uniforme de nieve en la que apenas destaca ninguna piedra, y eso que decían que escaseaba. A pesar de la huella la subida es dura por las fuertes pendientes y porque siempre te hundes un poco pero la progresión es notable, los picos de Paderna, Renclusa incluso los magníficos Salvaguardia y La Mina van quedando abajo lo que en sólo 2 h nos hace pensar que hemos alcanzado la cota 2800m. En nuestro transitar vamos alcanzando montañeros pero el grueso del pelotón está a punto de alcanzar la parte alta del glaciar, la que confluye con el paredón final de La Maladeta. Ya se aprecia el inclinado corredor y la adrenalina hace aparición.
Bueno, y sigue no??...te has quedado en lo más interesante.
En el corredor está ya metido un grupo haciendo cosas raras. Progresan en ensamble pero un chaval de la edad de Miguel lleva un jumar. Aviso a mi hijo del cuidado que hay que tener no vaya a ser que alguno de la cordada resbale a arrastre a los otros 5. Lo hacemos por la derecha buscando terreno más helado que le de más emoción a estos 120 metros. Cuando salimos del corredor sólo queda una arista sencilla hasta la cumbre en la que podemos disfrutar de un paisaje impresionante hasta donde alcanza la vista que son unos cuantos cientos de kilómetros en un día espectacular. En la misma nos encontramos a parte del grupo mencionado que ya ha llegado arriba, y a un grupo de Zaragoza, mientras esperamos a toda la gente que en este momento están saliendo del corredor. Una parejita muy simpática tiene miedo a la bajada y en ese momento se que me tengo que encargar de echar una mano para que la gente baje de allí. Como el grupo inexperto lleva una cuerda de 60 igual que nosotros prepararé un rapel desde un cordino situado 20 por debajo de la salida del corredor. Desde esta hasta el cordino la gente se tendrá que buscar la vida. Y así pasa cuando montado el rapel empieza a bajar gente con más o menos dificultades. A más de uno tengo que ir a ayudar abandonando la seguridad de la reunión inmersos en crisis de nervios y prácticamente llevarles de la mano hasta la misma. Cada uno es un mundo, hay gente que no lleva nada y se apoya en la cuerda para bajar, otros se han hecho un arnes con cintas y les hago un prusik, otros llevan reverso pero no saben usarlo y les doy un curso acelerado, otro baja sin ayudarse de la cuerda de culo pero cuando le digo que lo que está haciendo es una barbaridad acude ansioso al salvavidas improvisado. En fin que finalmente por allí pasan unas 30 personas, las que ya estaban y muchos más que se han incorporado. 2horas de frío helado que empiezan a ser insoportables con las manos heladas. Finalmente quedo sólo en la montaña cuando ya son las 15h, bajo sin dificultad, recupero la cuerda y después de recibir felicitaciones y agradecimientos de unos y otros nos lanzamos para abajo donde llegaremos en sólo 40m. Ya en el refugio la parejita de Zaragoza encantadora se ofrece a llevarnos hasta la capital maña al día siguiente sabedores de nuestros problema con el coche. Ese día todavía no se acaba para miki Jr quien como le ha parecido poco lo de subir a un 3000 en invierno ha decidido compartir con la familia De Diego una salida nocturna con esquies de fondo mientras su padre espera leyendo libros del pirineo en Llanos del hospital. Tras pasar noche en el apartamento de nuestros amigos saldremos rumbo Zaragoza para más tarde tomar un autobús que nos dejará en Avda de América donde acaba nuestra accidentada salida al pirineo.
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