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lunes, 10 de abril de 2017

PEÑA TELERA (GRAN DIAGONAL) 8 de ABRIL del 2017

Volvemos al Telera, por algo será. Hay una relación especial entre esta montaña y nosotros, una atracción mutua que data del  año 95 cuando a la vuelta de una curva bajando de Escarrilla las nubes se apartan , desaparecen y aparece la cara norte súbitamente, espectacular. Casi 2000m de desnivel desde el Embalse de Bubal y 800m verticales desde los prados del valle. Desde entonces no he dejado de soñar con ella, pido perdón al resto de montañas del pirineo por este enamoramiento repentino y le pido todos los perdones del mundo a Telera cuando hago incursiones entre sus compañeras de viaje.

Habíamos subido con Manu y Miki en abril del 2013 por el corredor de la Y en una aventura excesiva desde el punto de vista físico para un chico de 12 años y repetimos con Buba, Yago y Ramón un año después en condiciones muy invernales y desfavorables que arrasaron con las fuerzas de Ramón y donde vivimos una situación tensa para salir de allí. Era hora de volver y de llevar a los amigos que andan empezando en esto del alpinismo Alfonso y Laury, a Miki ya crecidito, fuerte y con un altísimo nivel de escalada y por supuesto a Buba. En las montañas del pirineo nos encontramos cuando es menester y actualizamos la memoría de nuestras vidas, alejados en kilómetros,  unidos en lo sentimental siempre contamos con él para hacer montaña. Habrá cordada mejor que la nuestra pero no creo que con el ambiente sano y divertido que nos une a los cinco. Y es que "si señores" ya somos una cordada, y eso implica muchas cosas, desde la entrega, solidaridad con los compañeros, esfuerzo y compromiso, cosas difíciles de conseguir hoy en día pero de lo que no falta en nuestro grupo de montaña de Samburiel.

A eso de las 5.00 toca levantarse para estar ya equipados con todo el arsenal a las 8.00, media hora más tarde nos metemos en el campo de hielo, nos preceden algunas cordades. Y es que este corredor es con mucho el más visitado del pirineo. Pendientes de 45º que recorremos a un fuerte ritmo que hace que Alfonso no se encuentre muy fino.





















Pero el gran campo de hielo termina y comienza la parte más estrecha y vertical del corredor. La GD sin ser uno de los corredores más difíciles de la sierra de Paratacua no tiene desperdicio, sus pendientes llegan a los 65º, es mantenido sin apenas descanso y te encuentras con resaltes de hielo que ponen a pruebas tus nervios de acero. Por si fuera poco y si buscas dificultad puedes meterte un bloque empotrado de mayor o menor dificultad dependiendo de las condiciones. Eso es lo que eligen Miki Jr y Buba no sin antes ""obligarles"" a usar la cuerda y montar reunión. Nosotros tres lo evitamos como casi todo el mundo por la derecha, más fácil pero impresioante.


 Alfonso encuentra su mejor forma en la segunda mitad del corredor, ya juntos los 5 encaramos la parte final, el llamado "Balcón" un tramo sencillo técnicamente pero donde desaparece el espolón izquierdo abriéndose un abismo de 800m muy expuesto. Aquí Miki padre se hace un lío y pasa verdaderas dificultades en un tramo de roca inestable que se podría evitar. La salida se muestra corta de nieve por lo que se convierte en otro paso mixto nada desdeñable donde algunos nos aupamos con la cuerda, conviene no arriesgar cuando queda 1m de corredor y 800 por debajo de nosotros.

Estamos fuera, impresiona mirar hacia abajo



  Tras largo descando inciamos el tramo final, 190m de desnivel aún hasta la cumbre que después de un esfuerzo físico tan alto y la bajada de adrenalina se hacen duros pero es aquí con la vista del paso horizontal, la Peña Parda detrás de nosotros y la aparición de las montañas de Ordesa donde se disfruta de veras de este soberbio mar de montañas.


Y llega el momento mágico de la cumbre dle Telera una montaña de modesta en altura supera en dificultad a cualquiera de los 3000miles del pirineo. Requiere conocimiento, destreza y actitud porque no sólo hay que subirla es que hay que bajarla y eso no es tonteria.

Descendemos por la cara oeste buscando el corredor de la Y habitual ruta de descenso por los dos rapeles existentes. Cometemos el error apenas 50m debajo de la cima de no esquivar una zona muy vertical y con piedras sueltas por lo que nos abocamos a un primer rapel más que técnico muy peligroso por las cáidas de piedras que nosotros mismo provocamos. Más adelante vemos que se pudo salvar más hacia la derecha por fuertes oendientes de nieve.


Alcanzamos el final de la Y donde hay cola, debemos esperar. La paciencia obligada invita a la reflexión, a la broma y al recreo del pirineo con el Midi, Balaitous, Arriel, Escarra, Anayet .....al fondo.

Empezamos a bajar de uno en uno por este primer impresionante rapel, por el ambiente alpino que se respira y al abismo que tenemos debajo de nosotros. Cuando terminamos el segundo rapel obviamos la posibilidad de realizar un tercero y decidimos bajar destrepando uno con mayor o menor dificultad. Este ejercicio de funambulismo requiere toda la frialdad del mundo y aunque la nieve está blanda a nadie le gustaría sufrir una caída con 400m de corredor.


Unas horas más tarde, (bajar nos ha llevado casi  el mismo tiempo que subir)  llegamos al parking de La Cuinacha donde termina nuestra aventura.

Nos vemos en Cataluña